Café de funeral

Rica bebida caliente,
con buen piquete
para acompañarte,
para despedirte;
hasta  la muerte.

Mi café de funeral
calientito, bendecido,
Con tequila, mezcalito,
Ron, brandy o solito;
siempre bien acompañadito.

Por los pésames, de recuerdos
de aquellos tiempos.
Por los pésames de vida
que sufrimos  en ella.
Sorbo a sorbo, disfrutando
del pesar del alma.

Calmando las tristezas
las agonías lentas,
los hechos repentinos,
los pasos decididos,
a veces exitosos o fallidos.

Mi café de funeral,
me acompaña al atardecer
para preparar, el cierre del día,
con suspiro nostálgico
por el tiempo de hoy, no,  aprovechado.

Descanse en paz el día
te velarė en la noche,
te lloraré mañana,
ya que te sabré perdido;
esperaré el atardecer y lanzar suspiro.

Con mi café de funeral
recibiré los pésames
de mi alma inerte,
ante el tiempo perdido
viendo a la nada, al olvido.

Con mi café de funeral,
acompañadito con piquetito;
saboreo el suspiro
por un día más vivido,
bueno o malo pero vivido.

Con las esquelas dedicadas
a los amores perdidos,
a las risas pasadas,
a las miradas furtivas,
a las sábanas mojadas.

Con mi café de funeral,
la risa pícara, no,  se hace esperar
recordar la picardia
con que te vacile durante el día,
jugando a ser intrépidos.

Con mi café de funeral
velo los sueños,
despido el día,
suspiro al pasado,
dejo ir el ayer y doy bienvenida al hoy.

Con mi café de funeral
me despido,
ordenó las esquelas,
brindó por la vida,
entierro lo funesto.

Con mi café de funeral
acompañadito de piquete;
llega el olvido como suspiro.
La alegría se desborda
mi mente voladora.

¡salud! Por los que fueron,
los que estuvieron,
los que están
y por los que llegarán;
Con mi café de funeral.

R. B. D
Mar Viento